sábado, 8 de agosto de 2009

La canción del verano

He de reconocer que tengo mi puntito hortera. No siempre escucho música triste, de esa de rasgarse las vestiduras y de la que, cuando pasas malos momentos, normalmente de esos relacionados con el sexo opuesto, huyes como de la peste para no hundirte todavía más ante el primer acorde... El verano, como buena época de explosión jovial, de exaltación de la vida por encima de las miserias de lo cotidiano, hace que le sea infiel a mis queridos cantautores y me pase por Cadena Dial. Sí, ya lo he reconocido, soy una hortera. Tengo una larga lista de canciones del verano y las canto a voz en grito en el coche.

La de este año todavía no la he decidido. Siempre termino eligiendo en septiembre, con la canción de la Vuelta Ciclista. Hasta para eso voy a deshora. A ver cuál toca este año. Veo que se llama Merezco y es de una tal Zahara (intuyo que gaditana... ya veremos, miedo me da). Canta la muchacha: "Sólo llegué a ver salir aviones // confío en ir volando en ellos, algún día // debería haber mirado las señales // y no llegar al sitio equivocado. // No le digas a nadie que no llegué a tiempo". Muy propia para una competición deportiva de ir pedaleando buscando la meta o para subirte la moral en general. El año pasado la canción de la Vuelta fue Pretendo hablarte, de la enana bailona de UPA Dance (Aquí tan sola estoy y en medio de la nada // en medio de la nada y entre tanta gente); en 2007, fue de Hanna, Como la vida (y empecé a correr sin pensar en el ayer // y empecé a ser fuerte a llevarme la corriente), y en 2006, Nena Daconte con En qué estrella estará... Para qué seguir, los de la organización quieren que los ciclistas abandonen antes de salir. Buscan la huida del maratón con las letritas-de-dios.

En fin, que las firmes candidatas de mi top ten horterini de este años son: Mejor mañana, de Vega; Summercat, de Billie the Vision and the Dancers; Moving, de Macaco; Manos al aire, de Nelly Furtado, y... atención, una de Manuel Carrasco, que no sé ni cómo ha entrado en la lista, Sígueme, se titula. Me pregunto cómo funciona mi cabeza, que es como un queso gruyere por culpa de las neuronas perdidas, para que me gusten estas canciones. Cuáles deben ser los mecanismos que obran en mi cerebro para que me parezcan versos (???) cantables tales como... (Todas tienen además su correspondiente coreografía para hacer sentada en el asiento del piloto).

- Diles a los demás que fui un cometa errante // una luz que se perdió buscando el norte.
- Tonight tonight tonight tonight // I wanna be with you tonight tonight tonight.
- Moving, all the people moving, one move for just one dream.
- No tengo armas para enfrentarte // Pongo mis manos, manos al aire.
- Y vienes hoy por mi // como un huracán sincero // desvistiéndome en la vida // y comiéndome por dentro.

Vamos a recapacitar. O esto tiene una profundidad tan honda que no es captable por una inteligencia humana vulgar o son letras tan burdas que hacen que te olvides de todo tipo de profundidad –valga la redundancia- casi de por vida. Al fin y al cabo, son canciones de verano. Ligeritas. Pero eso de "desvistiéndome la vida y comiéndome por dentro" no tiene precio. Qué manera tan fina de referirse a lo único... Al final éste va a ser un cantautor y todo. Guapo, eso sí, pero cantautor al final.

Esta tarde me ido de compras. Literatura ligerita también para llenar las horas fuera del coche sin pensamientos trascendentales. Alguna frase épica saldrá. Mientras, me voy a la cama, porque como dijo Kant, “pensamientos sin contenidos son vacíos; intuiciones sin conceptos son ciegas” y se me está yendo la pinza.

1 comentario:

  1. Zahara es de Úbeda (Jaén) y te recomendo que escuches el disco entero, te va a gustar.

    Saludos

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